PASEOS Y CRUCEROS FLUVIALES
Ciudad marítima, que figuraba entre los principales puertos de Europa en el siglo XVIII, la ciudad de Burdeos y su viñedo redescubren su río. Un crucero por el Garona es una manera original de aproximarse a la ciudad, sus viñedos y el estuario del Gironda.
¿Te seduce la idea de realizar un crucero por el Garona?
Embarca en el centro de la ciudad, para descender por el río hasta el estuario. La travesía te lleva a lo largo de la impresionante fachada de los muelles de Burdeos, bajo el nuevo puente Chaban-Delmas, donde la ciudad deja su paso a la naturaleza y a las vides de Blayais y Médoc.
Hay destinos y escalas para todos los gustos: los islas del estuarios, salvajes y misteriosas, o las increíbles fortificaciones del Verrou de Vauban (Cerrojo de Vauban). Obra del célebre ingeniero Sébastien Vauban, el «Cerrojo del estuario» o tríptico defensivo único en Francia se encuentra situado en el estuario del Gironda, el de mayores dimensiones de Europa. Construido en tiempos de Luis XIV, su objetivo es proteger a Burdeos, que se encuentra a 50 km aguas arriba, de los ataques enemigos. Se compone de 3 fortificaciones: la Ciudadela de Blaye, el Fuerte Pâté (situado en la isla Pâté en el centro del estuario) y el Fuerte Médoc, en Cussac-Fort-Médoc. Tríptico único en Franca, el «Cerrojo del estuario», que abarca las fortificaciones de Vauban, figura en la Lista del Patrimonio Mundial desde 2008.
La mayoría de estos cruceros incluyen catas de los vinos de Burdeos y comidas. Si deseas un poco de marcha, comprueba si el programa incluye cena con música… Y si solo deseas descubrir Burdeos, puedes elegir entre una sencilla velada «tapeo del viñador» o un crucero en bateau mouche por el río.